Fin a la temporada de una obra que aborda ese tema
Luc Tartar es un
joven dramaturgo francés autor de dos novelas y unas veinte obras
teatrales. Parte de estas son una mirada a los adolescentes actuales que
son bombardeados para que adelanten su despertar a la libido y entregarse
prematuramente al despertar sexual.
Ese autor aborda el tema con textos que combinan
poesía y frases rudas. Con ellas describe desde su punto de vista
particular los sentimientos de los muchachos hacia esa combinación de
enamoramiento y lascivia.
Uno de sus trabajos donde se puede observar esto es Les Yeux
d'Anna (Los ojos de Ana), Roulez Jeunesse! (¡Vamos juventud!) y en S'embrasent (Abrasados).
Esta última obra mencionada fue montada en esta ciudad por
el grupo Teatro Indigo, bajo la dirección de Anahí Alonzo y producida por Anaii
Cisneros (no hay error en los nombres de ambas, así los escriben ellas). Esta
última también actúa en ella.
Las presentaciones comenzaron el pasado día 2 y terminaron
este domingo 25, en el Centro Cultural
Olimpo y en el Foro Alternativo “Rubén
Chacón”.
En esta puesta en
escena el escritor plantea las reacciones y consecuencias que generan dos
preparatorianos que se besan en el patio del colegio y son vistos por algunos
estudiantes y también por una anciana que desde el segundo piso de su casa pasa
el día entretenida viendo la actividad del colegio, en particular durante los
descansos.
La noticia corre por la escuela y más allá. Llega a oídos de los colegiales, los profesores, el director del plantel y el padre de la muchacha involucrada en el
suceso.
Todos responden en forma diferente ante
el acontecimiento. Entre el chismorreo y la expectación se plantea
violación de autoridad, temor a los embarazos no deseados y las envidias o censuras por parte de otros jóvenes.
El muchacho involucrado en esa situación es el “carita” de
la Prepa, el Don Juan profesional que ya tuvo enamoradas y otras suspiran por
ingresar a esa lista.
Las miradas de este galán son relámpagos en los corazones femeninos,
paralizan a las púberes inquietas ante la llegada de Eros a sus vidas. Ellas sienten cosquilleos y se convierten en ollas
de vapor.
Así lo plantea el dramaturgo en este proyecto que no sólo aborda el
enamoramiento y el deseo sexual. Se exponen también situaciones de
discriminación, intolerancia y reflexiones sobre esa etapa de la vida.
El papel del joven Tenorio recae en Jair Zapata, actor que
ha estado activo en otras obras de teatro. Su compañera adolescente es Anaii
Cisneros, la cual también va madurando en su carrera de actriz gracias a su
intervención en otros proyectos teatrales.
Hay dos actores más en escena: Amilcar Barrera, otro que ya acumula bue número de papeles en su haber, y Andrea
Lorenzana, a la cual no habíamos visto anteriormente, nos agradó su buen
fraseo. En estos dos recae la tarea de representar a varios personajes en esta obra.
La directora de esta representación distribuyó bien al grupo de actores en la escena. Junto con los escasos recursos
escénicos los movió adecuadamente. Nos pareció que hay fragmentos de los textos
que fueron recitados, no actuados. Es un
desperfecto que obstaculizó la llegada del mensaje al espectador.
El grupo de actores juveniles puso ánimo y empeño en sus
papeles y en el volumen de voz. Se nota que hubo trabajo y sudor en los
ensayos.
No pudimos ver esta obra en los inicios de sus
presentaciones, nos tocó asistir a la penúltima función y constatamos
que atrajo a buen número de asistentes, generó interés.
Eso es relevante si
tomamos en cuenta la competencia que tuvo esta obra en esas fechas en que
abundaron los espectáculos del Festival de la Cultura Maya y además hubo otros
grupos teatrales locales que también desafiaron esa avalancha de recursos
económicos, publicitarios y
organizativos que hubo en torno a ese evento anual. (Mérida Cultura).
Hola, agradezco mucho tus observaciones, sólo como comentario nos quedan dos funciones de temporada en el Centro Cultural Tapanco los días de noviembre 18 a las 9:00 y 25 a las 8:00pm.
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